Continua la danza de los millones en Miami Dade. Era de esperarse y los comisionados aprobaron en una primera lectura un paquete de ordenanzas que constituyen la propuesta presupuestaria de la alcaldesa Daniella Levine Cava para el año fiscal 2024-2025. El presupuesto supera por primera vez en la historia del condado los 12.6 mil millones de dólares, cifra que se dice fácil pero que tiene demasiados ceros a la derecha y crea dudas sobre cual será la carga real para el bolsillo del contribuyente.
Con un discurso que para muchos sabe a hueco, manido, político y poco funcional, la alcaldesa subrayó que el condado continúa invirtiendo en áreas clave como la vivienda, el transporte y la seguridad pública. Lo cierto es que, la propuesta presupuestaria también incluye aumentos significativos en las tarifas de servicios públicos, lo que ha generado tensiones entre los comisionados y preocupación en la comunidad.
La reunión de la Comisión fue escenario de una activa participación ciudadana, donde casi 200 residentes expresaron sus inquietudes y demandas ante los 13 comisionados. A lo largo de las audiencias públicas, los asistentes hicieron énfasis en la necesidad de más viviendas, mayor acceso a servicios de transporte y mejoras en la seguridad pública.
Uno de los puntos más polémicos del presupuesto fue el aumento en las tarifas de servicios públicos, que generó desacuerdos entre los comisionados. Las tarifas de agua y alcantarillado aumentarán un 6%, lo que representa un incremento de aproximadamente 40 dólares al año para el hogar promedio en Miami-Dade. Asimismo, las tarifas de recogida de basura experimentarán un aumento del 27%, lo que costará a los hogares unos 150 dólares adicionales anuales. Estos aumentos fueron aprobados con una votación de 8 a 5, lo que refleja la división entre los comisionados sobre la necesidad de estos ajustes.
Los comisionados Kevin Cabrera, René García, Roberto González y Anthony Rodríguez votaron en contra de ambos aumentos, mientras que Raquel Regalado y Kionne McGhee también expresaron su oposición a los aumentos de las tarifas de basura y agua, respectivamente. A pesar de las críticas, la alcaldesa defendió los aumentos como necesarios para cubrir los déficits operativos que el Departamento de Residuos Sólidos ha enfrentado durante años.
En cuanto a los impuestos a la propiedad, se mantendrán sin cambios en cuatro de las cinco categorías que financian servicios del condado, incluyendo bomberos y bibliotecas. A pesar de la estabilidad de las tasas impositivas, el propietario promedio de una vivienda en Miami-Dade verá un aumento en su factura debido a la ley estatal que permite un incremento de hasta el 3% en el valor tasado de una propiedad cada año.
Otro punto de fricción en el presupuesto fue la reducción en las subvenciones para organizaciones sin fines de lucro, lo que ha generado preocupación en la comunidad cultural y social. El Departamento de Asuntos Culturales del condado ha reducido en un 10% las subvenciones disponibles, lo que representa una disminución de 2.5 millones de dólares en el fondo de este año. Además, los fondos destinados a programas de asistencia legal para inquilinos de bajos ingresos que enfrentan desalojos también se redujeron, pasando de 2 millones a 1 millón de dólares.
El presupuesto también contempla un gasto adicional de 3 millones de dólares para la contratación de nueve oficiales de policía que servirán como sargentos de los 13 comisionados de Miami-Dade. Este gasto es mayor que los 1.3 millones de dólares destinados al mismo concepto en el presupuesto anterior. Sin embargo, la decisión final sobre la cantidad de oficiales que apoyarán a la comisión dependerá del nuevo sheriff, quien asumirá el control de la policía a partir de 2025.
Otro gasto significativo incluido en el presupuesto es el pago inicial de 26 millones de dólares para el nuevo palacio de justicia civil del condado, un proyecto aprobado en 2019 y valorado en 267 millones de dólares. Este edificio de 28 pisos, ubicado en West Flagler Street, comenzará a requerir pagos a partir de 2025. Finalmente, el presupuesto también asigna fondos para cubrir el subsidio de 36 millones de dólares aprobado por la comisión para los partidos de la Copa Mundial de Fútbol que se celebrarán en Miami Gardens en 2026. Este subsidio incluye 10.5 millones de dólares en efectivo y horas extras para policías y paramédicos.
Es necesario subrayar que la separación de las cinco oficinas constitucionales (sheriff, recolector de impuestos, tasador de la propiedad, secretario de los tribunales y supervisor de elecciones) representará un cambio significativo en la administración de los servicios públicos. Esta reestructuración implicará un gasto de aproximadamente 30 millones de dólares en su primer año, y se espera que impacte de manera considerable el funcionamiento del condado y la distribución de recursos.
Muchos se preguntan dónde quedaron palabras como transparencia, enfoque y prudencia fiscal. Mientras entre reuniones, intereses personales, puntos de vista y burocracia se diluyen salarios y gastos significativos, los residentes de Miami Dade se mantienen a la espera de beneficios palpables que se deriven de esta danza millonaria. Los discursos pueden sonar bonitos y a la misma vez, no decir nada.