1. La negociación justa de los recursos
Cada relación tiene una cantidad limitada de recursos en diferentes momentos y en diferentes situaciones. Ya sea tiempo, dinero, amor, disponibilidad o resiliencia mental y emocional , esos recursos deben asignarse con justicia, generosidad y comprensión. Las parejas exitosas negociaron juntas las prioridades y decidieron lo que cada uno podría necesitar en un momento dado
En tiempos de abundancia, esas asignaciones son más fáciles de gestionar. Hay más de lo que cada socio necesita y puede satisfacer más fácilmente solicitudes, deseos o una emergencia. Cuando los recursos se agotan, las parejas exitosas saben cómo adaptarse a esas arcas menguadas y negociar para llegar al mejor acuerdo posible.
2. Mantenerse actualizado
Las exigencias de la vida cambian. Los recursos aumentan y disminuyen. Las diferentes etapas de la vida requieren adaptaciones y ajustes. Las pérdidas son inevitables. Los primeros sueños pueden quedar en el camino y surgir otros nuevos. En muchos sentidos, las relaciones de calidad son como negocios que crecen y cambian con lo que funciona para mantenerlos funcionando de la manera más óptima posible.
Las relaciones no son diferentes. Qué respuestas, ofrecimientos y contribuciones valiosas que pueden haber sido más que suficientes en un momento dado deben poder transformarse continuamente a medida que nuevos requisitos exigen diferentes reacciones, recursos o prioridades. Las personas que mantienen relaciones de calidad reevalúan periódicamente cómo necesitan modificar quiénes son, qué pueden dar o necesitar y cómo va la relación en general. Con evaluaciones siempre nuevas, apuntalan lo que falla y dejan de lado lo que ya no funciona.
3. Amor desinteresado
El amor se compone del deseo honesto de buscar la gratificación de las necesidades personales intercalado con la garantía de que su pareja también debe prosperar. Toda pareja íntima lucha entre la necesidad de seguridad y protección y el deseo de libertad para crecer. El primero mantiene la comodidad de la previsibilidad y el segundo aporta desafío y entusiasmo a la relación.
Aquellos de ustedes que han apoyado a su pareja por su propia cuenta saben lo aterrador que es arriesgar su propia seguridad para darle a su pareja la oportunidad de seguir lo que él o ella considera que ofrece más posibilidades y sueños alterados. A pesar de su inseguridad, sabe que es lo correcto sin importar el costo.
Siempre es mejor saber que tu pareja prefiere estar contigo que en otro lugar. Pero, si sabes que él o ella prosperaría mejor lejos de ti, mantenerlo atrapado para mantener tu seguridad finalmente fracasará a largo plazo. La forma más profunda de amor es querer lo mejor para el otro, incluso cuando ese sacrificio genera un miedo potencial a la pérdida. El viejo refrán: “Deja que algo quede libre”. Si está destinado a regresar, lo hará”, es profundamente cierto en las relaciones exitosas.
4. Comunicación congruente, auténtica y abierta
Cada intento de conexión tiene un motivo altruista y egoísta. Ambas son respuestas profundamente humanas y deberían compartirse sin vergüenza . Aunque algo de estrategia y diplomacia son parte de toda relación exitosa, una comunicación de calidad brinda a ambos socios un aviso sobre lo que se quiere y cuáles podrían ser las consecuencias si no se satisfacen esas necesidades.
La comunicación congruente ocurre cuando el lenguaje corporal , las expresiones faciales, las entonaciones de voz, el ritmo y el tacto de una persona presentan la misma imagen. Cuando las personas se sienten cómodas con sus buenas cualidades, trabajan en sus limitaciones y son honestas acerca de ese proceso, son auténticas y directas, y le dan a la otra parte una comprensión completa de qué esperar.
En toda comunicación, existe el contenido de las palabras y la forma en que los interlocutores se relacionan entre sí mientras se conectan. Las palabras son inútiles si el proceso se ha vuelto amargo. Los buenos comunicadores están alerta a estos cambios del momento e inmediatamente reparan la interacción antes de volver al contenido.
5. El verdadero significado de la confianza
En su nivel más básico, las personas que confían entre sí saben que la otra parte no se comportará lejos de ellos de manera diferente a como lo hacen cuando están en presencia del otro. Es como si hubiera un tatuaje metafísico en su presentación que indica “Estoy felizmente tomado”. Hay orgullo en la forma en que ambos hablan de la relación con los demás. Cuando hablan de la relación con los demás, sus frases comienzan con “nosotros” en lugar de “yo”.
Las personas cambian con el tiempo y esa confianza debe renegociarse y compartirse constantemente. Lo que se puede ver se puede cambiar. Simplemente no hay lugar para sorpresas negativas.